La soberbia
La serpiente que se muerde la lengua y muere envenenada.
Animales simples
rata que nunca imaginé mediocre y trepadora.
infeliz
Peor que la muerte,
la traición.
La primera no la se arregla,
es así.
La gente se muere. no suele volver.
Con la segunda seguís vivo,
sigue la posibilidad de esa cola de paja.
sigue la posibilidad de esa cola de paja.
Cola de paja
Rastrera
Gusana cola.
Que se humilló por tierra
pregonando altos vuelos.
Convencido su esplendor, ser superior,
escondiendo querer poco.
arrastrando a los demás con la mentira.
Buscando nutrir con una bola de mierda.
El bloqueo ciego nos hace pensar que somos ese Hesse
cuando somos mugre
Pero igual, convencido que sos Hesse,
posible Buda.
Profesás, aprendés, lobo estepario,
un camino de aprehender espíritu.
Y no fuimos más que una cosa básica y lineal, primitiva, protoreflexiva, pseudopoética
ciega soberbia.
Pero nos encanta el personaje.
comemos, lo creemos, lo creamos, vendemos el buzón convencidos.
El martir depresivo y reflexivo.
dejamos vacío, superficie sucia.
Panfleto de artistas
berretas, baratos.
Miedo a ir de frente
cobarde
Basura
No quiero comerme envidias
Me perdono por haber permitido que sucediera esto. No me culpo.
Ni te culpo a vos.
Y espero que puedas perdonarnos.
Que quieras.
Que veas que tenés que perdonar.
Que actuamos mal
y que por eso estamos mal.
nos hace felices e inútiles,
que estás bien,
que es el mundo el que está equivocado.
Que son los demás.
Así estás quedando.
Yo te quiero y no quiero que sigas así,
pero no voy a hacer más.
No es mi jurisdicción.
no busco venganza. Mi bondad es venganza,
mi amor es venganza.
buscar felicidad es venganza.
Ser con los demás.
Conocer, crecer.
Vomitar la amargura y la bronca.
Transformarlo en piedra que se hunda rápido, profundo.
o reviente en mil fragmentos en el aire
o reviente en mil fragmentos en el aire
Pero el zurco quedó hecho, el rastro se marcó hondo.
Y ni vos, ni yo, vamos a ser los mismos nunca.
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